Sesión fotográfica en la Ermita de Vinaròs: Carlos

Vemos como se hace grande, y como es más curioso. Cada día con más fuerza, más ganas de descubrirlo todo. Esta vez fuimos al Ermita de Nuestra Señora de la Misericordia y tuvimos que correr para seguirle.

Ahora quería subir a la barca, después jugó en los gatos. Entró dentro de la ermita y finalmente subía por los árboles. Cada día es una aventura para Carlos con estas ganas de jugar con todo lo que encuentra.

De nuevo un placer haberte volver a fotografiar!